Recubrimiento en polvo
Sin lugar a dudas, los recubrimientos en polvo representan hoy una opción muy eficiente dentro de la industria; su práctica aplicación, es un factor determinante para que su popularidad siga en crecimiento.
Típicamente se aplica de manera electrostática y posteriormente se cura con calor intenso.
Estas fases producen un acabado nítido y una resistencia notable.
La calidad de este procedimiento, parte precisamente del polvo; en su elaboración se utiliza un termoplástico, o bien, un polímero termoestable, que garantiza la adhesión y la resistencia en el recubrimiento. Por lo anterior, la calidad del polvo, depende directamente de su pureza.
En ese sentido, cobra relevancia un proceso para cribar y eliminar residuos en su composición. Así, el proceso de tamizado de la pintura en polvo, resulta un factor muy importante para garantizar la calidad del recubrimiento y también para mejorar la productividad del proceso.
Ventajas del tamizado: ciertamente, el proceso de tamizado se puede ocupar en muchos sectores y niveles, pero a menudo se busca el mismo propósito: una técnica de filtrado para garantizar la pureza de una sustancia, ya sea sólida o líquida. En el caso de la pintura en polvo, hay que destacar que las partículas contaminantes no sólo entorpecen la aplicación al bloquear la salida en las pinturas pulverizadoras, sino que también disminuyen la efectividad del recubrimiento y puede provocar aumentos en los costos de la mano de obra, al generar desperdicios y obligar a un procedimiento de limpieza.
La importancia del tamizado, más allá de los distintos procedimientos, radica precisamente en un coste operativo: al purificar el polvo después del proceso de fabricación se garantiza una aplicación fluida, se protegen las herramientas y, sobre todo, se reduce el tiempo de trabajo y se genera un curado efectivo para el recubrimiento.
Otra ventaja radica en que, ya sin contaminantes, la clasificación de los colores en los polvos se facilita y también vuelven más exactas las tonalidades de los colores. Queda claro que, principalmente en el factor de la productividad del proceso, el tamizado es un factor elemental para la aplicación de pinturas en polvo.
