Procedimientos previos a la soldadura de bisel

La preparación de la soldadura de bisel se consigue por medio de dos procedimientos principales, ya sea por vía mecánica o métodos térmicos.

Mecanizado: Para este procedimiento se utiliza una máquina fresadora, ya sea manual o automática, o también una herramienta de corte. El procedimiento consiste en realizar un corte perpendicular en ambas piezas, para después rectificar las inclinaciones en cada uno de los planos.

Es muy importante respetar el ángulo correcto en este paso, ya que pueden existir diferencias entre los cortes de la pieza uno y la dos. Al rectificar, se consigue el bisel en la parte final de la pieza, por lo que se vuelve aún más importante el ángulo en el procedimiento. Después sólo hay que alinear y posicionar las dos partes en la zona de soldadura.

Oxicorte y rectificado: Por otra parte, se puede utilizar el corte por medio de un soplete que use el oxígeno y las altas temperaturas en el corte. Cabe destacar que este procedimiento también puede realizarse por medio de láser. La diferencia con el método anterior radica en que no se cortan las piezas perpendicularmente, sino que primero se realiza el corte oblicuo en ambas piezas, respetando los ángulos de incisión.

Una vez expuesto el biselado, se lleva a cabo el corte perpendicular para remover la punta en las piezas. Sólo entonces se rectifican los componentes metálicos y se alinean para el proceso de soldadura. Por las características de los procedimientos, el mecanizado suele ser el más efectivo y exacto, ya que no requiere un corte biselar desde el primero paso.

Para este procedimiento existen equivalencias de acuerdo al espesor de la pieza. Se recomienda una velocidad mayor en la herramienta de corte para los espesores más bajos, e ir reduciendo la velocidad conforme incrementa el espesor del metal.

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