La importancia del electropulido

El proceso de desbarbado es fundamental para un trabajo óptimo, sin embargo, llega el momento en que el trato con las rebabas es más difícil debido al volumen y tamaño de los materiales, por lo que es necesario tratarlos con procesos no mecánicos.

Actualmente el electropulido se utiliza con más frecuencia para mejorar la funcionalidad de varias piezas y componentes en la industria. Es un proceso de tratamiento superficial en que el metal que será pulido funge como ánodo en una celda electrolítica, disolviéndose, en otras palabras, se opera con un rack lleno de materiales de trabajo que son cargadas positivamente y se sumerge en una solución de electrolitos cargados negativamente.

Se puede electropulir una gran variedad de materiales. Este proceso se emplea para sustituir o disminuir las etapas de pulido mecánico además de aportar a las superficies propiedades estéticas, facilidad de limpieza, incremento de la resistencia a la corrosión y alivio de tensiones.

Sin embargo, no se puede dejar de lado que el electropulido es un proceso específico para las partes que no se pueden tratar por el pulido mecánico debido a su volumen y tamaño. Las partes con rebabas más grandes son más aptas para procesos como el tambor rotatorio y el acabado vibratorio.

Adicional a lo anterior, algunos proveedores del servicio de electropulido pueden procesar una mayor variedad de materiales de lo que muchos clientes creen. Además del acero inoxidable, el proceso es apto para bronce, cobre, aceros al carbono, aleaciones de níquel, titanio, Nitinol y otros.